Se celebró la quedada
correspondiente al mes de mayo. La asistencia en esta ocasión fue grande,
llegando a reunirnos diez personas.
Como habíamos adelantado por el WhatsApp,
por diferentes motivos no logramos llegar a la cena bastantes de nosotros por
lo que en este punto, lamento no poder dar referencia de ella. Quizás lo haga
algún otro miembro del Ayllu. En cualquier caso, puedo imaginar que haya sido
estupenda, como siempre. Gracias, amigos de la Posada Blanca.
En cuanto a la música que nos une…en
fin…fue una noche fantástica de nuevo. Yo me lo pasé pipa. Por cierto, que las aportaciones
musicales siempre son de todo el conjunto de miembros activos, como no podía ser de otra manera, ya que
independientemente de la enorme e incuestionable calidad de alguno de ellos,
todos los presentes disponen sus instrumentos para la batalla: han fallecido
algunas canciones, si, pero su fusilamiento fue tan bonito…
Se escucharon zambas, chacareras
y tangos de la mano de Pablo Chabrol al que acompañamos con nuestras voces e
instrumentos y allí se desgranaron grandes clásicos de la música sudamericana.
Por
supuesto, mi querido Frente Andino de Liberación no se quedó atrás, así que el
partido en esta ocasión quedó en empate. Anda, eso si, algo pachucho Pepe, nuestro compresor, que ya tiene a buen recaudo el disco solicitado. Que lo disfrutes, amigo.
Pero hubo más. No nos olvidemos
que vivimos en una aldea poblada por irreductibles asturianos que resisten
siempre al invasor. Y quizás por eso, a una rubia que andaba por allí, le dio por
plantarse con un par de vaqueiras de esas que hacen temblar el suelo. Y digo yo
(y no digo ná) que pa estas cosas, va a ser mejor que nos habiliten el sótano
del restaurante. No sé. Por si acaso. En Almería aún se preguntan qué pasó.
Gracias Jorge, por tu música y tu
agradable compañía. Sé que estabas pachucho. Gracias también a Graciela, compañera
de música y de risas.
De allí nos fuimos a las 02.30h. de
la mañana. Subiré alguna foto cuando me reponga. Y no digo más. Que lo cuenten otros. Repartamos el saludable trabajo
de escribir en este blog y seamos cómplices activos de la aventura.